
Visión General
El Modelo Organizativo busca sacar el máximo provecho de los recursos humanos existentes en la Agencia y los equipos de trabajo de sus entidades y empresas colaboradora para impulsar que estos recursos se impregnen de los roles que se desprenden del modelo de servicios y del modelo de procesos del MOU. El modelo extiende la asignación de estos roles a todos los niveles organizativos que van a participar en la prestación de los Servicios TI de explotación de sistemas y plataformas a los centros de competencia TIC que atienden a los organismos de la Junta de Andalucía.
Uno de los aspectos clave del MOU es la definición de roles y funciones que permiten la integración efectiva entre servicios y procesos. Esta estructura refuerza la colaboración entre las distintas áreas de la ADA y garantiza una prestación de servicios más eficiente, escalable y alineada con los objetivos estratégicos.
La correcta asunción de roles definidos en el MOU es fundamental para:
- Facilitar la toma de decisiones estratégicas.
- Establecer líneas claras de responsabilidad en la gestión de servicios.
- Asegurar una ejecución efectiva de los procesos.
- Potenciar la mejora continua mediante la retroalimentación.
Estructura del modelo organizativo
La estructura organizativa propuesta se divide en cuatro niveles jerárquicos:

Nivel Estratégico: define la visión global, estrategias y políticas. Roles clave: Responsable Global de Servicios y Procesos.
Nivel Táctico: traduce la estrategia en programas específicos. Roles clave: Responsables de Líneas de Servicios y Gestores Globales de Procesos.
Nivel Operativo Horizontal: ejecuta servicios y procesos comunes. Roles clave: Responsables de Servicios y Procesos.
Nivel Operativo Sectorial: gestiona la operativa local en los centros de competencia TIC. Roles clave: Responsables de Soporte Local.
Esta estructura fomenta la colaboración interdepartamental y permite una gestión eficiente y escalable de los servicios.
Asignación de roles y funciones
La asignación y correcta adopción de roles definidos en el MOU es esencial para garantizar:
- Responsabilidad clara: cada rol tiene funciones bien delimitadas, evitando solapamientos.
- Gestión eficiente: la división de tareas permite una mejor distribución de recursos.
- Calidad en la prestación de servicios: los roles especializados aseguran un enfoque profesional y alineado a mejores prácticas.
- Mejora continua: los responsables de procesos identifican y ejecutan mejoras constantes.
Como consecuencia, el despliegue del MOU se plantea para sacar provecho de la estructura organizativa existente, tanto directamente en la Subdirección General de Operaciones y Telecomunicaciones (SGOT), como en SANDETEL, que se encargará de la supervisión, el control y seguimiento, como en la propia estructura organizativa de los equipos técnicos que se adscriban a cada uno de los contratos basados, a medida que éstos vayan celebrándose. En la figura siguiente se muestra un esquema ilustrativo del reparto de roles principales entre estos tres bloques.

Modelo de relación y canales de comunicación
El MOU establece un modelo de relación estructurado en niveles para garantizar una comunicación fluida y efectiva entre las partes involucradas en la prestación de servicios TI. Este modelo define mecanismos claros de interlocución y seguimiento para fomentar la cooperación y la alineación con los objetivos organizativos.
- Interlocución por niveles: se establece una jerarquía de comunicación donde cada nivel (estratégico, táctico y operativo) cuenta con roles definidos responsables de interactuar con sus homólogos en otras áreas. Esto permite una escalabilidad eficiente en la toma de decisiones.
- Foros de seguimiento: se organizan reuniones periódicas para evaluar el cumplimiento de objetivos, analizar problemas y promover mejoras. Estos foros incluyen tanto reuniones internas como encuentros con los centros de competencia TIC.
- Tratamiento de excepciones: se han definido procedimientos para gestionar situaciones excepcionales, garantizando una respuesta rápida y efectiva.
Respecto a los Canales de Comunicación, aseguran una gestión transparente y eficiente de la información entre los distintos actores.
- Herramientas tecnológicas: se utilizan plataformas digitales para el registro, seguimiento y notificación de incidencias, cambios y peticiones.
- Reuniones formales: se calendarizan encuentros regulares para la revisión del estado de los servicios y procesos.
- Comunicaciones informales: se fomentan interacciones dinámicas para resolver problemas urgentes o compartir información crítica.
- Informes periódicos: la emisión de reportes permite una visibilidad clara sobre el rendimiento de los servicios.
Este enfoque integrado facilita una gestión ágil y coordinada, potenciando la capacidad de respuesta y la toma de decisiones informadas.